martes, 30 de noviembre de 2021

EL LARGO CAMINO HACIA EL AMOR 5

 Algunos días después..

Jaejoong empeñó un anillo, con ese dinero pagó un mes adelantado de arriendo.

Es una usura, decía la nana, cobrar tanto por una casa que se está cayendo a pedazos. Se lamenta, empeñar una joya tan valiosa en una miseria.

Pero no estaban en situación de exigir más.

La tensión sigue latente, pero están en tregua por eso el toque de queda no corre en esos días. De todas maneras hay soldados en cada punto de la ciudad.

Jaejoong sale a caminar en las noches. Lo que más abundan en ese barrio, son los burdeles y los bares. Entonces no es de extrañar ver a las parejas en las esquinas entregándose al deseo...Constantemente los borrachos son expulsados de los bares, gritando groserías.

El señorito Jaejoong había sido educado de manera particular, un hermoso pasivo, un uke con modales refinados. Más hermoso que una princesa y más delicado que una flor.

Mientras recorre a lo largo de la calle...

Las muchachas, se asoman a las ventanas mostrando sus tentaciones, ríen...Los hombres siempre caen en el anzuelo, entran al burdel y al rato salen felices pero sin ningún centavo en los bolsillos.

Mira el cielo, el humo de la pólvora permanece mezclado con las nubes grises. Pronto caerá un diluvio, había dicho la nana...Camina toda la noche, deteniéndose a ratos, tratando de pasar inadvertido, sube el cuello de su abrigo.

La nana, hace lo que mejor sabe, maldecir. El cretino que tiene por esposo debería darle su parte, es lo justo, decía...Un día se presentó en la casa del capitán, ella estaba decidida a escupirle la cara y exigir lo que por derecho le pertenece a su señorito. El capitán la intimidó con su mirada fría...no fue grosero pero su porte y actitud inhiben a cualquiera. Le mostró los documentos que ambos firmaron, sonríe de medio lado, Jaejoong había firmado no solo los papeles de matrimonio, también un papel anexo en el cual renunciaba a cualquier derecho, recompensa, bienes materiales o dinero.

La nana respiró profundamente—capitán Jung, un día usted...se arrepentirá y quiero estar presente cuando mi niño le patee el culo.

Diciendo aquellas cálidas palabras salió de la mansión.

—Maldito cretino, algún día lo castraré, que Dios me de vida y salud.

No dijo a Jaejoong que había ido a ver al capitán, quiso evitarle una angustia más.

Ocurrió que...

En una de esas caminatas nocturnas, hubo una revuelta, los policías llevaban a cualquier persona que resultara sospechosa. Jaejoong retrocedió. Una muchacha lo agarró del brazo y lo arrastró hasta el burdel. El contraste era realmente abismante, afuera se desataba una pequeña guerrilla y adentro del burdel era otro mundo, risas, cantos...bailes y mucha sensualidad.

—Te he visto rondar todas las noches. Dice la mujer, maquillada de manera exagerada

—Sígueme (dice)

Jaejoong se quedó quieto, ella vuelve a insistir—prefieres beber o tener sexo con alguna de mis chicas.

Jaejoong siguió a la mujer, hasta los vestidores, se sorprendió cuando ella se quitó la peluca y las pestañas postizas...

—¡Eres! (carraspea) un hombre.

—Ya lo sé...

—Pero...

El hombre sonríe—te asombraría saber que a la mayoría de los caballeros prefieren mujeres con una sorpresa entre sus piernas.

Ríe ante la cara de asombro de Jaejoong...

—No eres de aquí, se nota, eres un señorito que perdió su fortuna.

Jaejoong no contesta, mientras toca las suaves plumas de un atuendo rojo.

—Algo buscas, todos buscamos algo...amor, venganza. Cual buscas tú?

Jaejoong lo mira pero se mantiene callado.

—Adivinaré, tu vida fue maravillosa hasta que conociste a una persona que pisoteó tus ilusiones, correcto?

Jaejoong lo miró sorprendido.

El hombre ríe—Es la historia universal, querido, el amor y el desamor. Entonces que buscar, amor o venganza.

Jaejoong—Me tengo que ir...

—Siempre escapas?

—No me conoces en absoluto.

—Créeme, querido, yo era como tú, pero, la vida no está hecha para débiles. Menos en estos tiempos.

Jaejoong mira todo el lugar, parece que les va muy bien.

Las muchachas fijan su tarifa, dice el hombre, obvio que tengo un porcentaje, pero si quieren algo más intenso, los caballeros deben desembolsar más dinero, es un buen negocio, si es que no tienen escrúpulos y la dignidad se quedó en algún lugar del camino.

—Eres muy joven...

—Mi abuela me heredó este paraíso, fue la mejor cortesana de la que se tiene memoria, es lo que solía decir con orgullo.

Jaejoong hace una mueca, cuando se dispone a salir, retrocedió, ve llegar al capitán.

—Es el capitán Jung, un asiduo visitante... tiene una favorita (indica) ves? ya se van a una habitación. Es un excelente amante, los chillidos de las muchachas se escuchan en cada rincón del burdel...Estás pálido, lo conoces...?

—Hablas demasiado...

—Solo cuando no tengo nada en la boca...(ríe)

El muchacho toma la peluca...antes de colocársela, mira a Jaejoong—me llamo Heechul, pero todos me llaman simplemente Chul. Se coloca la peluca y las pestañas postizas, algo de brillo en los labios...realmente hermosa. Sonríe, también me llaman de otras maneras.

Cuando Jaejoong está por salir. Heechul habla...

—Al capitán le gusta fanfarronear sobre sus conquistas femeninas...seria bueno que un hermoso uke le bajara los humos.

Jaejoong lo mira—por qué haría tal cosa, a mi que me importa lo que haga ese idiota.

Heechul sonríe—puedes engañar a los demás, a mi no.

Jaejoong frunce el ceño, Heechul ríe—digamos que te creo, pero de todos modos ganaríamos los dos, ya te veo con un hermoso vestido ajustado, los caballeros pagarían sumas elevadas por una mirada tuya. Si decides aceptar mi oferta, ya sabes el camino. Pero, una vez aquí dentro ya no habrá vuelta atrás.

Otro muchacho se acerca a Heechul, lo ven alejarse—Por qué insistes.

—Reconozco una mina de oro cuando la veo.

—Crees que regresará?

—Volverá, y lo convertiré en la cortesana más deseada de la región. (ríe con entusiasmo) seré millonaria, digo, millonario.

Mientras Jaejoong dio una última mirada hacia el balcón del burdel, en alguna de esas habitaciones, su marido se complace con otra.

Puede el odio ser tan profundo como fue su amor...?

Cuando llegó a la casa, la nana y el cochero estaban en la calle, hacía frío y comenzaba a llover.

El dueño de la casa, los expulsó a la calle. Jaejoong lo buscó y reclamó, había pagado todo un mes por adelantado, pero el sujeto dice que si no le pagan otro mes, se quedarán sin techo en esa fría noche de invierno.

—Deme las llaves, nuestras cosas están adentro.

—Se quedarán como pago por las molestias...

—Molestias, molestias? (repite la Nana)., hijo de su...

En ese momento Jaejoong lo tomó del cuello y azotó contra la muralla—las llaves, las quiero ahora.

Estaba tan molesto, con el mundo, con el capitán, consigo mismo...

Al rato

—Y si regresamos al pueblo? De todos modos esta casa no me agrada, mire, ya comienzan a crecer árboles en las paredes.

Jaejoong respira hondo, la mira—tengo que salir ahora, cierra bien la puerta.

La nana sonríe, al sujeto no le quedarán deseos de volver a molestar.

—Donde va, es ya de madrugada.

Cuando regrese, nada volverá a ser igual.

Al poco tiempo...

Se comenzó a hablar de una bella cortesana que es dueña de la voluntad de todo aquel caballero que la mira...Una hermosa mujer que sabe de artes, escritura, poesía...canto. Y, una maestra en las artes amatorias.

El capitán Jung Yunho, había abordado su navío,  en una misión. Pero incluso en esas lejanías la fama de la cortesana llegó a sus oídos.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

PLENILUNIO 15

 Pronto serán los juegos anuales de destreza, y esta vez será especial. Cada cinco años todos los clanes, sin distinción, tiene el derecho d...