TE ODIO MI AMOR CAP 2

Algunos días después de negarse rotundamente...

Yunho coloca el equipaje de Jaejoong en la cajuela del auto.

Jaejoong con voz lastimera—Mamá...

Ella emocionada, sueña con el brillante futuro de su hijo. por lo cual Jaejoong no tuvo valor para negarse nuevamente, así que respirando hondo para agarrar valor...subió al auto.

El trayecto fue interminable para el pobre muchacho.

Relájate y disfruta de la atención, dice Yunho.

¡Aleje su mano! ¡Ponga atención al camino!?

Puedo conducir y tocarte...

Jaejoong agarra su mochila y la coloca sobre sus piernas., pervertido, murmura.

Yunho ríe—Ni una fortaleza te librará de mi.

Ha visto alguna vez a un loquero?

Yunho alza una ceja, detiene el auto y se estaciona—Quieres comprobar que tan loco soy?

Jaejoong no pudo hablar, siente un nudo en su garganta.

Yunho se saca el cinturón se seguridad, inclina el asiento hacia atrás...lo mira, sonríe y afloja su corbata.

Jaejoong suda frio—Qué pretende...

Dormir, tuve un día agotador.

Dormir...dormir ¡Qué!? ¡va a dormir!?

No me digas que estás decepcionado, no te inquietes mi niño travieso, tendremos mucho tiempo para "eso".

Jaejoong se cruza de brazos ¡Idiota!

Rato después

Jaejoong despierta, Yunho sonríe—Te ves adorable dormido, tuve la tentación de despertarte como a la bella durmiente.

—Ya llegamos?

—Todavía no, lo cual es muy bueno...puedo disfrutar de tu compañía por más tiempo para mi solo.

—Tuve la leve esperanza que todo había sido una pesadilla, pero sigue allí con esa sonricita odiosa.

—Cada día recibo cientos de cartas y obsequios de hombres y mujeres. Pero yo no estoy interesado y, sabes por qué?

No me interesa saber.

¡Exacto! porque todas mis energías las tengo depositadas en ti.

Le dije que no me interesa (breve pausa) ¡Por qué yo!

Soy Jung Yunho, te miré y me encanté...mi arma apunta hacia ti.

Jaejoong hace una mueca y en tono burlón—Pues su pólvora no funcionará conmigo.

Yunho sonríe—Llegado el momento, verás incluso fuegos artificiales.

No puedo creer que tengamos esta conversación tan estúpida e infantil.

Tienes razón...me pregunto...Debo tomarte ahora mismo?

¡No te atrevas!

Oh un avance, ya me tuteas. Por mi está bien, eso significa que estamos entrando en confianza, aunque prefiero que entres en calor.

Jaejoong rueda los ojos, apretó su mochila y no dijo ni una palabra más.

Llegaron a la mansión

Yunho sonríe al ver la cara de Jaejoong—Qué te parece tu nueva casa.

Estoy impresionado, murmuró...

Yunho sonríe—No es lo único impresionante por aquí (sonricita)

Jaejoong lo mira molesto

Me refiero, dice Yunho, a la formidable biblioteca, que mal pensado.

—O D I O SO

El mayordomo se acerca...

Señorito Jung, que gusto verlo (alza una ceja y con una mueca) El señorito, es...

Supongo que recibieron mi mensaje, es mi invitado especial...Kim Jaejoong.

Si, señorito, todo está dispuesto como lo pidió.

Entraron a la sala, Jaejoong mira todo, no puede evitar que sus ojos brillen ante tanta opulencia.

Yunho se olvida del mayordomo y vuelve toda su atención a Jaejoong.

El mayordomo carraspea—Guiaré a su invitado a la habitación de huéspedes

Encárgate del equipaje, de Jaejoong me encargo yo.

El mayordomo—El señorito Max Changmin ha llamado en reiteradas ocasiones.

Yunho sin decir nada, entró al despacho.

Jaejoong pestañeó, pensó, debe ser alguien importante.

El mayordomo lo guio hasta la habitación, camina delante de él con aire de superioridad.

En la habitación

Como si fuera un niño con juguete nuevo, se sorprende de todo alrededor. Alucina con el jacuzzi.

Al rato jugando con la espuma...

Delicioso, verdad?

¡Que haces aquí!

Quiero jugar contigo...digo con la espuma.

¡Estoy desnudo!

Yunho sonríe y sin decir nada, con toda naturalidad se quita toda, toda la ropa. Jaejoong trata de no mirarlo.

Puedes mirarme, que no te dé vergüenza.

No tengo vergüenza y ¡No quiero mirarte!

...

¡Qué haces, suéltame!

Solo juego con la espuma...

¡Deja de tocarme!

Yunho ríe y sin más lo agarra con fuerza y lo lleva a la cama.

¡Gritaré!

Oh si, claro que gritarás.

¡Alguien vendrá!

Crees que la espuma sirva de lubricante?

¡No te atrevas!

Solo una degustación, no seas egoísta con tu tutor.

Jaejoong se aferra a las sábanas, sus mejillas arden...solo un toque de esas inquietas manos lo hizo gemir.

Justo en ese momento, el mayordomo golpea la puerta— Señorito Jung...Su padre lo espera en el despacho.

Mi padre, ahora, aquí? que inoportuno.

Rato después...

Jaejoong baja las escaleras, escuchó voces, al parecer discuten. La puerta se abre de pronto y el hombre mayor sale ofuscado.

El mayordomo, zalamero—Señor Jung, ya se va?

(Portazo)

Ese señor da miedo, murmuró Jaejoong...Yunho lo toma por detrás.

¡No te aproveches!

El mayordomo carraspea—Sirvo la cena, señorito? (Es ignorado)

Papito te regañó? dijo Jaejoong con una sonrisa burlona.

Necesitas mis manos allí abajo? que textura tan suavecita.

El mayordomo, vuelve a carraspear—La cena...

¡Abusivo!

—Pudiste negarte...

—Es lo que hago desde que te conocí.

Ya estabas bastante entregado, incluso te hice gemir, dijo Yunho agarrando una frutilla.

Jaejoong da un golpe en la mesa ¡Te advierto que...!

Que harás...

Me cuidaré de ti.

Yunho sonríe—Pretendes andar pegado a las paredes?

Jaejoong—Quiero hablar con mi madre.

Luego

Mamá ¡Mamá no sabes lo que estoy viviendo aquí!

Ella emocionada—Me imagino, hijo...soy tan feliz. El señor Jung, Yunho, llegó como un ángel a nuestras vidas. Dime más.

Yo, estoy bien (Dijo para no contrariar a su madre que se escucha demasiado emocionada)

Eso es lo que más importa, mi niño.

Jaejoong se quedó mirando el auricular, suspiró, no tuvo fuerza para desilusionar a su madre.

Al rato

Puedes dejar de acosarme?

No...

Mañana es el primer día en la universidad, debo dormirme temprano.

Yunho hace una mueca—Está bien, te dejaré dormir. Por esta noche.

Jaejoong pestañea y frunce el ceño—Que haces...no pretenderás dormir aquí, conmigo.

Es justo lo que pretendo.

A la mañana siguiente

En la ducha.

¡Puedo solo! reclama Jaejoong.

Yunho sonríe—Solo quiero que quedes bien limpio.

¡Pervertido!

El lujoso auto no pasó inadvertido, menos el elegante hombre frente al volante. Todos miran, saben perfectamente quien es. Suspiros y grititos ahogados son dedicados a él. Jaejoong hace una mueca. Camina por los pasillos sintiendo la envidia de sus miradas.

Un muchacho, se acerca—Así que tú eres el nuevo protegido de Jung Yunho.

Jaejoong pestañea—Qué has dicho?

Todos lo saben, viniendo de él...

Eh?

Es difícil convivir con él, verdad?

No entiendo que quieres decir.

Yo creo que si. Te daré un consejo, no te dejes seducir.

Todos pasan por su lado, murmuran. Jaejoong frunce el ceño, todo por ese idiota.

En ese momento llega Junsu, quien también estudia en esa universidad gracias a un misterioso benefactor.

Ese muchacho, no me agrada., dice alzando una ceja.

Por qué?

Ya sabes, tengo un sexto sentido.

Por supuesto que Jaejoong no hizo caso a la advertencia de Junsu, después de clases el muchacho de nombre Tae, quiso llevarlo a un bar. Pero Jung Yunho que lo esperaba apoyado en su lujoso auto, lo agarra del brazo y se lo lleva., todo esto visto por todos.

¡Qué te pasa!

No quiero verte cerca de ese muchacho.

¡Por qué!

Es problemático.

El único problemático aquí, eres tú.

Yunho respira hondo—Desde hoy en adelante, no harás nada sin mi permiso.

Y así pasó un mes.

Sucedió una tarde...Jaejoong desobedeció una vez más a su tutor y pretendía quedarse esa noche en la casa de un compañero, mismo que Yunho prohibió ver. Bebieron hasta que Jaejoong perdió el conocimiento. Todo esto preparado por el muchacho Tae, para seducir a Yunho y quitar del camino a Jaejoong., pero su plan no dio resultado, Yunho llegó... rescató a Jaejoong y le dejó claro a ese muchacho que no está interesado.

Jaejoong se quedó callado en todo el trayecto de regreso, avergonzado y molesto, por ser tan ingenuo. Ya su amigo Junsu le había advertido de las intenciones de Tae.

Al rato

Ve a ducharte, la cena será servida a la misma hora de siempre, sabes que me gusta la puntualidad., dijo aquello y se encerró en la biblioteca. Jaejoong obedeció.

Mientras se ducha, tira golpes al agua...ese idiota de Tae, como pudo engañarme. Respira hondo, piensa, Yunho se veía tan serio y tan apuesto...

Rayos ¡Lo odio!

Al rato

Jaejoong pestañea al ver a su tutor tan elegantemente vestido.

Cenarás solo, esta noche, supongo que está bien para ti.

Es más que genial.

Tengo compromisos previos...

No te pregunté.

Yunho hace una mueca—Te duermes temprano.

No soy un bebé

Yunho lo miró de reojo y salió de la mansión.

Jaejoong se quedó solo en esa enorme mesa, el mayordomo sonríe de medio lado.

Sé que me quieres decir algo...

—No se haga ilusiones, muchachito.

¡No me hago ilusiones con nadie!

El señorito Yunho acostumbra a traer jóvenes amantes.

¡No soy su amante!

El mayordomo se rasca la oreja—Esos modales, como sea...el señorito Yunho tuvo un noviazgo encantador.

Jaejoong se quedó mudo.

Luego

¡Y eso que me puede importar a mi!

Nunca he visto a un hombre tan atractivo, y educado; digno del señorito Jung. Es más, tengo la certeza que aún se aman. Estuvo a punto de casarse con el señorito Max.

Jaejoong repitió ese nombre en su mente.

Acostúmbrese a escuchar ese nombre, dijo el mayordomo.

Jaejoong se fue a su habitación...se sentó al borde de la cama, siente un extraño dolor en el pecho, respiró hondo y se quedó dormido.

Pasada la medianoche

Jaejoong despierta sobresaltado, pestañea...

¡Pero que haces!

Regresé temprano...

Ya pasa de la medianoche...

No puedo dejar de darte las buenas noches.

Déjame tranquilo, ya se te pasó el enojo?

No puedo estar molesto contigo.

Deja quieta esas manos.

Ya no gritas, me complace...

Tengo sueño, acosador.

Jaejoong se acomoda y da la espalda a Yunho., este sonríe pegándose bien a Jaejoong—Hueles tan bien.

...

¡Oye que haces!

No puede tenerte tan cerca y no hacer nada.

¡No empieces!

Empezaré muchas veces, hasta que me entregues todo.

Tengo una excelente idea, porque no buscar al tal Max ¡y me dejas tranquilo!

Yunho sin decir nada se levantó de la cama y se fue.

Jaejoong se quedó quieto y mudo por un rato...hasta que ¡ Te odio! (murmurando) te odio por hacerme sentir de esta manera.